El Alto Manhattan (Washington Heitghs), declarado Zona Amarilla por el rebrote COVID-19, lo que ha entrar en pánico a cientos de dominicanos. (FUENTE EXTERNA)
Nueva York, EE.UU.- Aunque el gobierno estatal y federal de EE.UU. está promoviendo que en las próximas semanas se comenzará a usar una de las vacunas para frenar el contagio de COVID-19, gran parte de los dominicanos radicados en el Alto Manhattan, han vuelto a entrar en pánico después que el gobernador Andrew Cuomo anunció que el barrio con mayor población de criollos en el mundo, ha sido declarado Zona Amarilla por los rebotes de la pandemia.
El Departamento de Salud de la
ciudad reportó la semana pasada que en los códigos postales 10031, 10032, y
10040, se han estado registrando aumentos considerables del rebrote que lo
sitúan con el más alto porcentaje del condado de Manhattan.
En centros comerciales,
esquinas, lavanderías, bodegas, barberías, salones de belleza, agencias de
viajes, clínicas y otros puntos donde convergen diariamente cientos de
dominicanos, la situación es uno de los temas de conversación.
Hay quienes lo toman con
tranquilidad, pero muchos otros entran en pánico, especialmente cuando familiares
que perecieron en el pico de la pandemia.
“Eso no se quiere ir”, dijo la
señora Patricia Ventura que estaba comprando en una bodega.
“Lo han dicho muchos, somos
necios, el virus no se acaba y se quedará para siempre como si fuera la gripe”,
vaticinó Rafael Pérez, quien trabaja en un estudio fotográfico y perdió a su
madre y un hermano.
Carmen Acosta, cuyo abuelo
murió en un centro de ancianos en el Alto Manhattan, dijo esperar que las
vacunas preventivas lleguen pronto a Nueva York, porque no quiere ver más
tragedias en su familia.
“Un primo mío estuvo más de
cinco meses entubado en cuidados intensivos y se salvó de milagro de esa vaina”,
añadió la dominicana.
“Nos jodimos, el gobernador y
el alcalde van a tener que cerrar los negocios de por aquí otra vez”, señaló
Papito Taveras, quien vende electrodomésticos y ropa usada en una cuadra del
Alto Manhattan.
En las zonas amarillas, la cantidad de personas que pueden reunirse está
limitada a 25, pero las iglesias a un 50 %, los restaurantes al 25% de su
capacidad total, especialmente los más amplios.
Los negocios reabiertos en la baja de la
segunda fase, siguen operando, aunque donde hay horarios nocturnos y no son
esenciales, tienen que cerrar a las 10:00 de la noche, incluyendo los fines de
semana, hora a la que también deben finalizar la venta de bebidas alcohólicas.
El gobernador Cuomo dijo que el estado
establecería un hospital de campaña para atender pacientes con coronavirus, en
el área de South Beach en Staten Island.
"El rebrote en Staten Island es de tal
nivel que está sobrepasando la capacidad hospitalaria. Y los hospitales nos han
contactado y dicen que necesitan camas de emergencia en Staten Island",
añadió Cuomo en una rueda de prensa ofrecida la tarde de este lunes.
Por su parte, el alcalde, Bill de Blasio,
adelantó que toda la ciudad podría caer en la categoría de Zona Amarilla en los
próximos días y que la alcaldía tratará de mantener las escuelas abiertas.
Fuente: Diario Libre
Síguenos en: noticiasdesdebarahona.com
0 Comentarios